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Orientación Vocacional desde la Logoterapia


Friday, January 05, 2007

Mónica Mabel Carri (LOGOFORO, Mexíco)

En nuestra sociedad actual se presentan cuadros complejos de difícil diagnóstico, fácilmente confundibles con otros de etiologías diversas.

¿Nos encontramos frente a un nuevo rostro del vacío existencial, más actual, moderno y encubierto?

Una nueva tarea nos compromete como miembros de una comunidad y como agentes promotores de salud, en una sociedad que alienta el acceso al poder, la fama, la abundancia, el consumo, el lujo, el placer, y que estimula el acceso a nuevas carreras que permiten ”alcanzar el éxito”.

Proponiendo caminos que alejan y desorientan respecto del verdadero sentido. La conocida orientación vocacional resulta insuficiente, a causa de la base antropológica en la que se sustenta.

Encuentra aquí la Logoterapia un nuevo desafío, la “Logorientación” o la orientación hacia el sentido, valiéndose de técnicas con alto valor diagnóstico, de efecto orientador y resiliente. Junto a la personalidad del logoterapeuta, fundamental para favorecer una apropiación de valores y establecer un vínculo férreo que los acompañe en el camino hacia el Logos, la verdadera vocación y la autotrascendencia. Logrando el desarrollo pleno del ser bio-psico-espiritual.

LOGORIENTACION, UNA PROPUESTA

¿Es nuestra comunidad facilitadora u obstaculizadora de la realización de sentido? La interrogante surge a partir de la llegada de una paciente a mi consultorio,Rosario. Cuyos síntomas principales eran: angustia, crisis de llanto, palpitaciones, trastornos en el sueño, aumento de peso a causa de su ansiedad por ingerir cantidades abundantes de alimentos, agotamiento físico y psíquico, dificultades reiteradas en el curso de su carrera, como no poder aprobar las asignaturas, y aburrimiento durante la clase, se quedaba dormida en la misma. Y la expresión reiterada de que todo lo realizado hasta el momento lo había hecho mal.

En referencia, especialmente, a una carrera que había cursado durante tres años, recibiendo el título de Técnica en Organización y Administración hotelera.

Posteriormente a ello consiguió trabajo en el Gran Buenos Aires como moza en un importante y reconocido hotel. Lejos de alegrarse, esto la hizo sentir que aquel empleo distaba mucho de lo esperado para la carrera que había hecho.

Luego de deambular por otros ofrecimientos similares comienza a trabajar en una oficina como encargada de venta de pasajes y turismo en general. Trabajo vinculado a la carrera parcialmente. Sin embargo, se sintió entusiasmada, a pesar de tener una tarea vinculada a la venta y al trato con el público en la mayor parte del horario, realizando tareas de escritorio organizativas sólo dos horas.

Rodeada de compañeros con quienes estableció buenos vínculos, pero que poseían escasamente estudios secundarios y una jefa Lic. en Relaciones Públicas, muy preocupada por detalles burocráticos y administrativos como notas diversas. No estableció con ella buena relación, a causa de este último punto, que terminaba exasperando a Rosario. En estado de irritabilidad, trataba mal a los clientes. Sin soportar sus pretensiones se ponía roja y con ira iba a su escritorio sentándose sola, aislada, permaneciendo así casi todo el resto del día. Generalmente su jefa le hablaba y le pedía que se tranquilizara. Hasta aquí pensaba en un posible estrés laboral desencadenado por el trato con el público.

Sin embargo un estado depresivo continuaba en relación a la vida en familia, presentando dificultades en especial con uno de sus hermanos, Juan José, quien usualmente le decía: que no había llegado a nada, de lo poco que ganaba en su trabajo y que a su edad no quería encontrarse en una situación similar. Sin estar casada, sin un título universitario. Sin haber logrado prestigio. Luego de estas “conversaciones” Rosario lloraba durante horas.

Rosario, tiene 25 años, proviene de la Pcia. de Bs. As. y se encuentra aquí estudiando con sus tres hermanos, todos menores que ella. Su madre profesora de literatura y su padre vendedor de seguros, han tratado en todo momento de solventar los gastos de los hijos para que puedan estudiar, con los menores obstáculos posibles. En especial su madre había notado con preocupación el estado de su hija y le había aconsejado que consultara a un psicólogo. Sumado a los celos que comenzaba a sentir por ese hermano, que no trabajaba, no hacía aporte ninguno en el hogar, que abusaba ostensiblemente de todo gasto lujoso que pudiera hacer con el dinero de sus padres y que nunca recibía sanción alguna por sus comportamientos. Se reprochaba el haber reprobado por tercera vez, una materia que cursaba en la carrera que actualmente está siguiendo: arquitectura, y esto le provocó un gran malestar, ya que iba a retrasar el tiempo previsto por ella para recibirse. Por otro lado había bajado sus calificaciones notablemente, siendo que en la escuela secundaria era una alumna estudiosa y con buenas calificaciones. El ver que sus amigas se casaban y se recibían en una universidad, nuevamente acentuaba la idea de que ella había hecho todo mal. Como sabemos los seres humanos atravesamos crisis evolutivas y esto también se convirtió en una hipótesis. Alternaban los períodos de aislamiento, momentos en que tanto en el ámbito laboral como con sus compañeros de la facultad había logrado establecer buena relación, mostrando ser una persona sociable. También en el ámbito familiar frecuentaba todo tipo de reuniones y casamientos que por cierto eran muchos, ya que es una familia numerosa. Cada casamiento, de una amiga, o prima, la sumía en una profunda tristeza…”a mi edad pensaba, ya debería estar casada y tener un hijo”. Había tenido relación con varios jóvenes, al principio la llamaban, y la veían, pero al poco tiempo dejaban de hacerlo, hasta que finalmente la relación se disolvía. Una de ellas, en especial dejó una huella profunda. Lo conoció en Buenos Aires, pero al igual que los demás a medida que transcurría el tiempo, iba demostrando menor interés hasta que terminó por desaparecer, sin dar explicación alguna. Este relato que no difiere demasiado del de otras jóvenes de la edad, me llevó a pensar como ya mencioné en un estrés laboral, o provocado por el estudio, o en una crisis evolutiva. Sin embargo la sensación de vacío, de vivir sin sentido, sin saber que hacer, sin tener un rumbo, una dirección, dudando de lo que se emprendía, a veces con arrepentimiento de lo hecho, no encontrando nada positivo a su alrededor, el llanto constante, la no posibilidad de establecer vinculaciones con cierta estabilidad. Actitudes de irritación y hostilidad respecto de su entorno. Esto me llevó a pensar en otra causa. Durante varias sesiones, solo lloraba, sin hablar, sin contestar, a veces mostrándose molesta. Decidí comenzar a administrar los tests y técnicas que ofrece la Logoterapia. Primero el Bender adaptación Hutt: presentando distorsión de la gestalt:, retrogresión, perseveración, simplificación, repaso de la figura total muy severa, la escala existencial: los resultados dieron puntajes por debajo de lo esperado en su totalidad, sólo se acercaba a lo normal ligeramente el AD, el Logo-Test: dando como resultado una peor realización de sentido (D 10) neurosis neogenética o depresión neogenética, el Phil: arrojó un puntaje de 72, falta de sentido o propósito claro en la vida y el cuestionario de Sardi, que corroboró los datos obtenidos cuantitativamente. El resultado fue neurosis noógena, este diagnóstico encierra un “no a la vida”. Utilizando el DSM IV, podría ubicarse como trastorno adaptativo, criterio E 43,20 (CIE) con estado de ánimo depresivo (309.0). Complementé dichas administraciones con el IPV que me permitió corroborar que Rosario no tenía disposición para la venta, tarea que es habitual en su trabajo, sino que también me permitió obtener datos acerca de su personalidad, datos que necesitaría para la nueva orientación. También el MBI para evaluar un posible estrés laboral, dando por resultado un alto grado de cansancio emocional, despersonalización y baja realización personal. El Test de Familia y H.T.P. corroborando la información obtenida.

Finalmente administré el Registro de Preferencias de Kuder, que confirmó como elección posible la carrera de arquitectura. El motivo de consulta era saber si la carrera que estaba cursando era la apropiada para ella. Ya que estaba pensando en cambiarse a administración de empresas, carrera que con equivalencias finalizaría más rápido que la actual.

Abordando al ser bio-psico-espiritual, me encuentro con palpitaciones, aumento de peso, trastornos en el sueño, bajo rendimiento intelectual, agotamiento, angustia, ansiedad, desorientación, sensación de vacío e inutilidad, falta de sentido. Lo único que aparece con un valor cercano al normal, es el autodistanciamiento, capacidad que ha desarrollado en el curso de las sesiones. Rosario ha sido una presa más de una sociedad que estimula a consumir sus productos con ansia y voracidad. Haciéndonos propuestas permanentemente para alcanzar el éxito, accediendo a un mundo irreal. Viajes, lujo, placer, consumo. La trampa va transformándose poco a poco en un pasaporte costoso a un futuro promisorio, que pocos podrán pagar, para finalmente alcanzar este ideal de felicidad y bienestar, que nunca llegará. Encontrándose a cambio frustración y vacío. Se alcanza el vacío, porque el sentido allí nunca estuvo. Nuestra sociedad elitista y consumista nos envuelve en trampas cada vez más elaboradas y sutiles. La carrera adecuada es aquella que permite amalgamar nuestro espíritu al sentido. En Rosario la apertura hacia el mundo circundante era escasa. Decaída, cansada, sin iniciativa, extenuada, débil. Falta de fuerza, energía y vitalidad. “Generalmente en estas personas se trata simplemente de “energías no despertadas”, que duermen igual que la Bella Durmiente, porque hace falta el príncipe que la despierte con un beso”. (1) Con un firme compromiso con el tratamiento, comenzamos a trabajar sobre este pivote. Volvimos la mirada hacia el entorno y encontramos su familia y amigos, el apoyo incondicional. Para volver hacia ella, y trabajar sobre “esa idea equivocada que tenía”. Mirar, mirarse y valorar. Comenzar a realizar pequeñas tareas, su arreglo personal, pulcritud, una actividad física, a concurrir al médico con asiduidad, a cambiar hábitos de alimentación. Poco a poco fue recordando que siempre le había gustado colaborar en la casa, en diferentes proyectos de los que fue partícipe. Creación de un quincho, tareas de pintura, colocación de electrodomésticos. Tareas simples, cotidianas, en las cuales Rosario era partícipe fundamental, en el mejoramiento del hogar del que disfrutaba la numerosa familia en un clima distendido. Su madre la recuerda con un papel y lápiz haciendo dibujos por la casa. ¿Se había equivocado en la carrera nuevamente? ¿Era una crisis evolutiva? A través de la Logorientación pude ver que Arquitectura era su elección y vocación, el cambio a otra carrera obedecía a una necesidad de equipararse a su entorno en tiempo de realización. Necesitábamos que el poder de oposición del espíritu se manifestara, con fuerza suficiente como para manifestar en poco tiempo, que estábamos en la senda correcta, plena de sentido.

La realización de una vida con sentido, le permitió mejorar y retomar la relación con su familia, amigos, subir sus calificaciones como nunca antes lo había logrado, tener novio, bajar de peso, desapareciendo los trastornos del sueño, las palpitaciones, y disminuyendo casi por completo la angustia y ansiedad. Los tests y técnicas que ofrece la Logoterapia son de un incalculable valor, a partir de ellos pude comenzar a trabajar con la paciente, que hasta ese momento solo lloraba, no pudiendo comunicarse de forma alguna. Las mismas tienen un alto poder resiliente que opera en la persona. Le permite el ejercicio de evaluar y valorar lo logrado hasta el momento, es decir aumenta su autoconciencia, revaloriza los vínculos, repiensa su lugar frente a las peguntas que le hace la vida, como también a partir de aquí le posibilita justamente reorientarse. Pero el uso de los tests no fue lo único que jugó a su favor. Dice Elizabeth Lukas: “Primero: Nadie puede comprender la totalidad de la realidad. Tampoco la totalidad de la realidad de otra persona, aunque ésta sea muy cercana a uno”. Segundo. La comprensión de la realidad depende de “los órganos de comprensión” de un ser. Para captar la realidad de otra persona se depende de la disponibilidad de una capacidad de identificación o no para poderse colocar en el lugar del otro”. (2)

Las técnicas propuestas desde la Logoterapia me permitieron acercarme al mundo interior de la persona, permitiéndole a ella misma reflexionar sobre aspectos de su vida pasados por alto, permitiéndole una apertura hacia el mundo externo y constituyéndose en un fuerte elemento resiliente de la persona, fortaleciéndola. Y permitiendo la reorientación. “…la búsqueda de sentido es lo nuestro, que nos es demandado toda la vida, pero el encontrar el sentido nos es dado de alguna forma y en algún momento, y probablemente no exista persona para quien ese encuentro no haya estado ya preparado cuando vio por primera vez la luz del mundo”. (3) De lo que se trata hoy, es de guiar y ayudar a encontrar un sentido

“En esta voluntad se concentra la disposición de una persona para convertir las realidades y posibilidades encontradas por ella en acciones con un máximo sentido alcanzable. La disposición de aceptar y cumplir una misión con la que se encuentra confrontada”.(4)

“Uno se alegra de algo, se alegra por algo, por la naturaleza, por el arte, por el amor. O uno le ofrece alegría a otro, al ofrecerle un pedazo de sí mismo: atención, agradecimiento, dedicación-un pedazo de sí mismo regalado al otro – La alegría entonces, es el efecto secundario de algo que hace feliz, encanta y tiene sentido, tal como puede ser la chispa el brillo que acompaña la luz divina”.(5)

Conclusión

La orientación vocacional como la conocemos hoy, nos propone una orientación hacia una carrera, sin tener en cuenta la integridad de la persona y su búsqueda de sentido, la realización en el ámbito familiar, laboral, vida de relación y de proyectos en el futuro.

No solo se desconocen estas vinculaciones, sino que sin amalgamar Vocación y Sentido, la desorientación está garantizada.

La Logorientación es un proceso único, para el que no existen recetas ni consejos. Y que se descubre entre dos personas, que se encuentran en una misma búsqueda, la realización del sentido.

BIBLIOGRAFIA (1) Lukas, E.:”Una vida fascinante”, Ediciones San Pablo, Buenos Aires, 2005, p. 51. (2) Ibídem; pp. 45/46. (3) Ibidem; p. 58. (4) Ibidem; p.87. (5) Ibidem; p. 93.

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